Biomagnetismo

La Imanterapia es un instrumento de la antigua-nueva medicina, diseñado para eliminar cualquier tipo de problema en los sistemas orgánicos y mantener el equilibrio en el estado de salud general, para todas las edades.El proceso es paulatino, cumple funciones de analgesia y de progresiva acción sanadora en todos los sistemas orgánicos.
Las contraindicaciones son muy pocas y se explica al paciente cómo evitar los riesgos, evitando la aplicación de cierto tipo de imanes, en zonas específicas del cuerpo. Tomando las precauciones, de acuerdo a cada caso particular, los imanes pueden ser utilizados en todas las formas de vida conocidas en el planeta.

Fundamentamos algunos de los principios de la Imanterapia, partiendo de conocimientos extraídos de la Física y de la Astronomía.
Tomemos simplemente como ejemplo: la Tierra es un campo magnético y de dicho campo depende el funcionamiento de los sistemas vivos que habitan sobre ella. El Sol es el generador de un campo magnético que protege a la atmósfera terrestre, con la función de evitar que sea agredida por agentes nocivos, provenientes de los distintos sistemas que la rodean.

¿Cómo funciona la Imanterapia?
Su acción principal se dirige al hierro contenido en la sangre. La hemoglobina, pigmento rojo de la sangre es hierro.
Su principal función es transportar oxígeno para alimentar los tejidos que componen los sistemas orgánicos.

¿Qué tipo de problemas se pueden tratar con Imanterapia?
Todos los trastornos físicos y muchos trastornos emocionales, debido al beneficio que reciben el Sistema Nervioso Central y el Sistema Nervioso Autónomo cuando los fluidos corporales (sangre, linfa, bilis, líquido cefalorraquídeo) se encuentran distribuidos en forma equilibrada.

¿Cómo es el tratamiento?
Se utilizan imanes de variados tamaños, formatos y potencias, colocados en forma transitoria o en calidad de permanentes (por espacio de varios días), de acuerdo a cada caso particular.
Es posible aplicarlos sin tocar directamente la piel, en algunos casos sobre prendas de vestir y también ubicándolos a cierta distancia (variable, desde algunos centímetros hasta dos metros, aproximadamente). Tambien la toma de agua imantada es muy recomendada en ciertos casos.
Las indicaciones se especifican de acuerdo a las condiciones generales del paciente. En el caso del paciente quemado o con enfermedades que comprometen la piel, la posibilidad de recibir campo magnético sin apoyar los imanes, es de máxima importancia.

¿En cuanto tiempo empiezo a sentir resultados?
Los resultados comienzan a verse en 24, 48 horas, o inmediatamente, en algunos casos. Pero, para asegurarse la estabilidad del resultado, se sugiere la continuidad de las aplicaciones, que en muchos casos puede realizarse por medio de imanes que quedan adheridos con banditas apropiadas y en otros, se utilizan imanes medianos que se aplicarán en el hogar, dos veces por día, aproximadamente.

¿Es compatible con otros tratamientos?
Sí, es posible continuar con los tratamientos tradicionales o con las terapias complementarias, con medicaciones o lo que al paciente le resulte apropiado. La Imanterapia acelera los procesos curativos y conduce al estado de salud y bienestar general.
Es un método fácil de aplicar, indoloro, sin efectos secundarios, que permite alcanzar una buena calidad de vida.
La Imanterapia permite deambular y continuar con las tareas cotidianas mientras el campo magnético aplicado localmente está produciendo lentos cambios en el metabolismo y la circulación de la sangre.

LA POSICION CORRECTA DE LOS IMANES TERAPEUTICOS:
La correcta ubicación es crucial para lograr los efectos deseados. Aprender a usar los polos correctos de los imanes bipolares es fundamental .
En los aspectos cosméticos, se han desarrollado modelos de aplicación altamente efectivos. La piel debe estar limpia, libre de grasitud, cuando se aplican los magnetos directamente sobre la piel.
Si reciben los cuidados adecuados, los imanes pueden durar muchos años.

CADA PERSONA ES DIFERENTE.
No hay recetas fijas. Los resultados son variables de acuerdo a la respuesta individual, en especial respecto a los tiempos en que pueden dejarse colocados. Los hematomas, golpes, torceduras, esguinces tienen respuesta inmediata, alivio del dolor en minutos y desaparición de la dolencia en pocas horas.
Una gran ventaja del tratamiento biomagnético es que la persona puede llevar sus magnetos adheridos sobre su piel, debajo de la ropa.

¿COMO TRABAJAN LOS MAGNETOS?
Pueden ser colocados en cualquier lugar y en cualquier momento para lograr alivio de dolores y tensiones musculares en cualquier punto del cuerpo y mejorar la circulación en general. Los magnetos "cerámicos", así denominados por ser el producto de la aleación de minerales duros y blandos, tienen polos identificados en sus extremos norte y sur.
Están diseñados para influir sobre los vasos sanguíneos. Su función es dilatarlos suavemente y aumentar el flujo sanguíneo en el área donde están colocados. Los procesos naturales del cuerpo son acelerados hasta lograr el bienestar de la persona, debido al aumento de la concentración de oxígeno y otros nutrientes vitales en dichas áreas.
Al mismo tiempo, se van retirando restos tóxicos acumulados en las áreas donde los tejidos se encuentren dañados. Además de los vasos sanguíneos, los neurolinfáticos deben ser aprovechados como zonas de aplicación.
En muchos casos, no es posible localizar el área donde el individuo presenta los síntomas, el verdadero origen del problema. Por ejemplo, si un músculo se vuelve hipertónico (espasmo), es posible que haya debilidad en su músculo opuesto, o sea en el músculo antagonista. Sin embargo, hemos podido concluir a través de la experiencia con numerosos pacientes, que toda persona que recibe tratamiento por campos magnéticos con imanes permanentes, recibe los efectos beneficiosos en todos sus sistemas orgánicos. Tal sería el caso de personas que habiendo sido tratadas por un problema músculo-esquelético, pudieron comprobar simultáneamente, por medio de análisis clínicos de rutina, que sus niveles de azúcar en sangre habían alcanzado una lectura próxima a la normalidad.